«Yo ya estoy feliz. Quiero verlo, conocerlo, dentro mío hay amontonados 39 años», dijo Delia que ayer habló por teléfono con su nieto que reside en el exterior.
En declaraciones a FM Vorterix, la abuela que es una de las doce primeras madres-abuelas que inició en 1977 la tarea que hoy permitió la restitución de 118 nietos, recordó a la hermana de Martín, Virginia, que a los tres años quedó al cuidado de Delia y que desde los 18 años dedicó su vida a buscar a su hermano, y que en 2011 se quitó la vida.
«Siento que la mano de ella me guía permanentemente y ahora estoy feliz, porque cumplí con la promesa que hice el 16 de octubre hace 39 años de buscar a Martín mientras viva. Cumplí con él y con mi nieta», sostuvo Delia al recordar a Virginia.
La Abuela de Plaza de Mayo admitió quedar «sorprendida» porque en su diálogo con Martín le preguntaba sobre su vida.
«Me preguntó con quién vivía y le dije que estaba sola, esperándolo, aunque no estoy sola de afectos», señaló Delia que continuará en la lucha por encontrar los cuerpos de su hija y de su yerno secuestrados en la ciudad de La Plata en octubre de 1976.